Los celulares flexibles son dispositivos móviles que cuentan con pantallas flexibles, lo que les permite doblarse o curvarse sin dañarse. Estos dispositivos utilizan tecnologías como OLED o AMOLED flexibles, que permiten que la pantalla se doble o se enrolle sin perder su funcionamiento.
Algunos ejemplos de celulares flexibles incluyen:
- Samsung Galaxy Fold: Es un teléfono inteligente con una pantalla plegable que se despliega para convertirse en una tableta. Cuenta con una pantalla interna flexible y una pantalla externa más pequeña.
- Motorola Razr: Es un teléfono con un diseño de concha clásico que se abre para revelar una pantalla flexible en el interior. Se pliega a la mitad para facilitar su transporte.
- Huawei Mate X: Es un teléfono con una pantalla flexible que se despliega hacia afuera, lo que permite utilizar una pantalla más grande cuando está desplegado.
Estos celulares flexibles representan una innovación en el diseño de dispositivos móviles, ofreciendo una mayor versatilidad en cuanto al tamaño y forma de la pantalla. Sin embargo, es importante tener en cuenta que estos dispositivos suelen ser más costosos y pueden requerir un cuidado adicional debido a la naturaleza de su pantalla flexible.