La diferencia entre un smartphone y un celular radica principalmente en las capacidades y funciones que ofrecen.
Un celular, también conocido como teléfono móvil o teléfono celular, se refiere a un dispositivo portátil utilizado para realizar llamadas y enviar mensajes de texto. Los celulares tradicionales suelen tener características básicas, como llamadas telefónicas, mensajes de texto y una pantalla pequeña. Estos dispositivos suelen tener funcionalidades limitadas en comparación con los smartphones.
Por otro lado, un smartphone es un tipo de teléfono móvil que va más allá de las funciones básicas de llamadas y mensajes. Los smartphones ofrecen una amplia gama de capacidades avanzadas, como acceso a internet, correo electrónico, navegación web, aplicaciones móviles, cámara de alta resolución, reproducción multimedia, funciones de GPS y mucho más. Además, los smartphones suelen tener pantallas más grandes y táctiles, lo que permite una interacción más intuitiva con el dispositivo.
En resumen, mientras que un celular se enfoca en las funciones básicas de llamadas y mensajes, un smartphone ofrece una amplia gama de capacidades avanzadas y funcionalidades adicionales que van más allá de las comunicaciones básicas. Los smartphones son dispositivos más completos y versátiles que permiten realizar una amplia variedad de tareas y actividades en comparación con los celulares tradicionales.